04.12.2011 22:21
El placer de servir
Toda la naturaleza es un anhelo de servir.
sirve la nube, sirve el viento, sirve el surco.
Donde hay un árbol que plantar, plántalo tú;
donde hay un error que enmendar, enmiéndalo tú;
donde hay un esfuerzo que todos esquivan, acéptalo tú.
Sé el que aparta la piedra del camino,
el odio de los corazones y las dificultades del problema.
Hay una alegría de ser sano y la ser justo;
pero hay la hermosa, la inmensa alegría de servir.
Qué triste sería el mundo si todo en él estuviera hecho,
si no hubiera un rosal que plantar;
una empresa que emprender…
No caigas en el error de creer que sólo se hacen
méritos con los grandes trabajos; hay pequeños servicios:
regar un jardín, ordenar unos libros, peinar a una niña;
el servir no es sólo tarea de seres inferiores.
Dios, que da el fruto y la luz, sirve.
Pudiera llamársele así: El que sirve.
Y tiene sus ojos en nuestras manos y nos pregunta cada día:
¿Serviste hoy? ¿A quién?
¿Al árbol, a tu amigo, a tu madre?
Gabriela Mistral